Fernández de Kirchner dio comienzo a su nuevo mandato ante la Asamblea Legislativa. Su hija le puso la banda presidencial bajo la mirada del saliente vicepresidente, Julio Cobos
A las 11:42, Cristina Kirchner partió en helicóptero desde la residencia de Olivos rumbo al helipuerto de Casa Rosada, donde descendió a las 11:50, para trasladarse en auto hacia el Congreso de la Nación. Vestida de negro, y no de blanco como llegó a especularse, la mandataria estaba acompañada por sus hijos Florencia y Máximo, además de la esposa de este último.
A las 12, Cristina Kirchner llegó al Congreso, donde Boudou la esperaba en la explanada central del edificio. Juntos ingresaron por las escalinatas hacia el Salón de los Pasos Perdidos. De allí, y tras firmar libros protocolares, se dirigió hacia el recinto donde la esperaba reunida la Asamblea Legislativa, presidida por el vicepresidente saliente, Julio Cobos?, quien sólo abrió la sesión.

Una vez jurado el vicepresidente electo Boudou, Cristina Kirchner juro finalizando su juramento diciendo. "Si así no lo hiciere, que Dios, la Patria y él me lo demanden", prometió, en memoria de su difunto marido, Néstor Kirchner, para luego recibir la banda presidencial de manos de su hija.
Luego, la mandataria dio su discurso, planteando los principales lineamientos de su mandato. La alocución duró poco más de una hora.
El Congreso recibió, además de a todos los diputados y senadores nacionales, a los ministros salientes, a los recién nombrados y a los gobernadores. Contó también con la presencia de un grupo de presidentes latinoamericanos, entre ellos el boliviano Evo Morales, la brasileña Dilma Rousseff y el uruguayo José Mujica, quien prometió su asistencia pese a una recomendación médica de reposo.
Cristina Kirchner, nacida en La Plata hace 58 años y de profesión abogada, consiguió la reelección el 23 de octubre pasado. Ese día la propuesta del Frente para la Victoria logró el 54% de los votos, con unos 12 millones de sufragios. Cuatro años antes había ganado con el 45% de los votos.

La Mega tumba de Kirchner en Santa Cruz

La señora Presidente de Argentina está construyendo en Santa Cruz una mega bóveda que albergarará el féretro "presidencial" de Néstor Kirchner en un pequeño Cementerio Municipal de Río Gallegos.

Una mega tumba que ni los más ilustres personajes de la historia de la humanidad han podido poseer. Pero ¿ todo sea para rendir homenaje a su extinto esposo ?. Nadie puede comprender la necesidad de realizar semejante tumba, enfocada a alimentar el propio egocentrísmo y crear el ¨mito¨ y así intentar influenciar a las futuras generaciones con fantasías de que a un nuevo prócer se deberá rendir honores, impulsando así ,el misticísmo y la liturgia hacia alguién que en vida no fue sino un presidente más y muy distante al mito que pretenden crear. Influenciando con eso, a  la población, a la necrofilia impulsado por el marketing de banderas, calles, películas, campeonatos de fútbol y ahora una mega-túmba con el nombre de Nestor Kirchner. La muerte no santifíca y no se puede pretender crear un personaje ficticio negando los actos y acontecimientos que impulsaron muchas veces a la intolerancia y la división entre los argentinos. ¿Hace falta seguir con la fantasía de crear un personaje que en vida nunca existió ?