Hay una manifestación, la ciudad está desquiciada, peleaste con tu pareja, los niños se enfermaron de gripa, la gente del trabajo te presiona con una entrega. Estás tiradísima al drama pataleando en tu interior: “¡Por qué yo!”. Sientes que el universo conspira en tu contra. De pronto, alguien llega y cuenta una anécdota que te hace reír a carcajadas. Cinco, quizás diez minutos después, tu cuerpo está visiblemente relajado, te duele el abdomen de tanto reírte, tu cara está roja… Y el drama ha desaparecido.
¿Te suena familiar? Claro que sí, la risa ejerció sobre ti un efecto liberador.
Casi todos hemos visto la película Patch Adams (basada en una historia real) o hemos escuchado hablar sobre los efectos benéficos de la risa en nuestra salud. Tal ha sido el impacto de estos descubrimientos, que hoy en día existen diversas terapias que recurren a las carcajadas para curar y prevenir muchos males.
Para resolver algunas dudas al respecto, me acerqué a la psicóloga Adriana Castro, de 34 años. Adriana se unió al grupo de Risaterapia en el año 2004. Después estudió terapia de la risa en España en 2006 y hace dos años continuó con su labor en México.
Luza: Cuéntame, ¿en qué consiste la llamada terapia de la risa?
Adriana: Actualmente hay dos enfoques distintos: la terapia de la risa y el yoga de la risa. Ambos tienen como objetivo incorporar los beneficios de la risa a tu vida cotidiana. La terapia está basada en juegos, dinámicas y ejercicios que fomentan o brindan herramientas para tener una actitud positiva. Lo que hace esta terapia es desdramatizar tu vida.
L: ¿Desdramatizar?
A: Sí, los adultos tendemos a hacer una tragedia de problemas muy simples. La terapia de la risa te permite ver tu vida de manera más positiva, amigable y funcional, es decir, de forma equilibrada. La risa nos enseña que ni todo es perfecto ni todo está mal.
L: ¿Cómo funciona el yoga de la risa?
A: Es una idea única que te permite reír sin ningún motivo. Es novedoso porque las personas necesitamos usualmente un motivo. Si miramos allá afuera, la situación general de crisis, inseguridad, depresión y desempleo no nos dan muchos motivos ni siquiera para sonreír. Pero gracias a la yoga de la risa aprendes a reír sin motivo. Es como ir al gimnasio; al principio no encuentras mucho sentido en correr sobre una banda sin fin, pero una vez que te habitúas, todo fluye.
L: ¿Por qué se le llama yoga?
A: Porque combina ejercicios de risa y con respiración yóguica o pranayama.
L: Leí por ahí que la risa es como una golosina para el cerebro.
A: Es cierto. Cuando te ríes, tu cuerpo genera endorfinas, éstas tienen un efecto de bienestar en nuestro sistema nervioso. Además, como aumenta el flujo sanguíneo, llega más oxígeno al cerebro.
L: Y al resto del cuerpo…
A: Sí, gracias a la oxigenación del cuerpo se fortalece el sistema inmune. El Dr. Otto Warburg, premio Nobel de Fisiología y Medicina, hizo un estudio en el que descubrió que cuando una persona se oxigena de manera adecuada, se pueden prevenir enfermedades como el cáncer. Es una aseveración que parecería descabellada, pero no lo es. El Dr. Warburg explica que en la respiración involuntaria o cotidiana siempre queda un poco de aire en los pulmones, el llamado aire residual. Éste vuelve a circular por nuestro cuerpo con toxinas que deberían haber salido, lo que provoca contaminación en los tejidos y generación de células tumorales. Para reírnos necesitamos sacar todo el aire en cada carcajada, así expulsamos todo el aire residual y llenamos nuestros pulmones con oxígeno renovado.
L: Dicen que una buena sesión de risa también mejora la digestión y evita el estreñimiento.
A: ¡Claro! La risa es como un masaje interno que pone en movimiento a más de 400 músculos. Incluso, nuestra espina dorsal también recibe ese masaje a nivel de cervicales, con lo que se vuelven a acomodar las vértebras.
L: Ahora me acuerdo de esas señoras que no se atrevían a soltar una carcajada porque decían que se les arrugaba la cara…
A: Definitivamente es una creencia del pasado. El efecto benéfico de la oxigenación se va también a la piel. Una piel oxigenada tiene menos propensión a arrugarse. Lejos de que te salgan más arrugas, estás dándole más vida a tu piel.
L: Es fácil reírse acompañado, pero si yo no puedo ir a una terapia…
A: Bueno, la terapia de la risa tiene la característica de ser grupal. Sin embargo, el yoga de la risa ha sido pensado para aquellas personas que requieren ejercitarse en solitario o a deshoras. Incluso, cuenta con ejercicios para reír en silencio y con los mismos resultados benéficos.
L: ¿Qué relación existe con la Risaterapia?
A: Se parte del mismo principio, pero la Risaterapia está enfocada a llevar alegría a los hospitales. Capacitan a las personas para aprender técnica clown y ayudar a los pacientes. Digamos que la Risaterapia es curativa, el yoga y la terapia de risa son preventivas.
L: ¿Qué tipo de cambios has visto en tus pacientes?
A: Todos expresan sentir menos preocupación. Problemas que antes les parecían demasiado complicados, ahora los pueden dejar pasar y fluir con ellos. Ya no se toman las cosas tan personales. Los pacientes que viven en la ciudad, por ejemplo, dicen que es el mejor desestresante. Imagínate, reír 5 minutos de manera continua equivale a 45 minutos de relajación.
L: ¿Qué cambios has sentido en tu vida?
A: El sentido del humor es el sentido de mi vida. Hoy puedo decirte que el tono de mi risa ha cambiado, antes era corto y agudo, ahora es largo y profundo. En situaciones difíciles ya no me angustio tanto, la risa me da una sensación de perspectiva ante los problemas y puedo resolverlos con una mejor actitud.
L: ¿A qué crees que se debe el éxito de esta terapia?
A: A que es una práctica sencilla. Otras propuestas de bienestar necesitan más rigor y disciplina, pero la risa… Bueno, a quién no le gusta reír.
Además de los beneficios a la salud, la risa es un motor de vida que fortalece nuestros lazos con la gente y nos llena de energía positiva. Reírnos un poco de nosotras mismas también ayuda a tomar distancia de los problemas y a encontrar mejores soluciones. Recuerda: al mal tiempo, buena cara y muchas carcajadas. Regálate un respiro para reír sola o acompañada, sentirás que el sol brilla de nuevo.
Y a vos, ¿qué te hace reír